LA INSISTENCIA DEL PRESIDENTE CON LA TRANSPARENCIA.

En más de una ocasión he hablado en artículos anteriores sobre el interés del Presidente Luís Abinader relativo a ejercer un gobierno realmente transparente o lo más transparente posible, como lo ha demostrado en su ejercicio y función en su condición de primer ejecutivo de la nación, no tengo que explicar nada al respecto porque los hechos hablan por sí solos y desconocerlo es ser muy mezquino, también posiblemente no es lo ideal pero desde una perspectiva justa Abinader ha demostrado que la transparencia y la honestidad en el manejo de la cosa pública es una necesidad por la historia en ese aspecto que hemos vivido en nuestro país.

Sobre todo que precisamente la República Dominicana viene arrastrando por años males como la corrupción administrativa, el despilfarro y el manejo medalaganario del dinero público, por lo que es digno de todo encomio y admiración la valentía de cómo el presidente Abinader ha enfrentado ese flagelo que llegó a convertirse en el cáncer más peligroso, sin embargo el presidente Abinader a capa y espada y sin importar las consecuencias se dispuso a transparentar y manejar éticamente el ejercicio gubernamental y en lo que ha tenido éxito.

Abinader iniciará un segundo mandato a partir de agosto de este mismo año y desde ya está hablando claro a sus actuales funcionarios y los nuevos que de seguro vendrán recordándoles que tienen que ser éticos y transparentes, acaba de ordenar a todos los funcionarios que no nieguen a la prensa o cualquiera que lo requiera ninguna información en el manejo de las instituciones que tienen al frente y se fue más lejos, manifestó que él conoce muy bien cuales son los funcionarios que están haciendo caso omiso a la ley y a su disposición en ese sentido.

Definitivamente que para este segundo mandato le esperan grandes retos y dificultades, pero por igual estamos seguros que él ha demostrado que lo único que le interesa es dejar una impronta de haber logrado un ejercicio del poder verdaderamente ético, pulcro y obviamente respetuoso de la dignidad humana, aunque también sabe que para casarse con la gloria en ese sentido, para este segundo período tiene que forzar la drasticidad en ese sentido y recrudecer su acción en ese sentido de manera contundente, tajante y severo con aquellos que osaren equivocarse e intenten hacer lo contrario y dilapidar o malversar el dinero de la gente.

De seguro que vendrán más veedurías, más exigencias para todos los que manejan recursos públicos y la sociedad tiene el sagrado deber de apoyar estas acciones toda vez que las mismas van en beneficio directo de la propia población; el presidente ha dicho y ha demostrado que continuará por ese mismo sendero trillando el camino de la transparencia porque está muy claro que es la única manera de que el país avance, se desarrolle y se encamine por los senderos de equidad y justicia social, así que sus funcionarios deben emular su ejemplo.

Por otro lado el presidente Abinader ha demostrado ser como estadista un verdadero demócrata, ya que sabiendo muy bien que dentro del tren gubernamental hay una significativa cantidad de adversarios políticos ocupando puestos importantes y claves lo ha dejado que continúen en sus posiciones, porque él sabe que el Estado es de todos y para todos, sin embargo esos adversarios políticos deberían ser más discretos, cuidadosos y especialmente más prudentes y manejarse con un perfil más bajo, porque muchos de esos empleados públicos se vieron haciendo campaña directa y sin ningún tapujo en contra del presidente y de su partido, ahí precisamente radica la grandeza de Abinader en que conoce de esa realidad y la maneja con verdadera prudencia.

Eso me recuerda la expresión del expresidente de la República Hipólito Mejía cuando acuñó la expresión “Gobernaré para todos sin olvidarme de los míos”, eso es lo correcto porque el Estado es de todos, aunque también conociendo la sensibilidad, la prudencia y el equilibrio del presidente Abinader, sé muy bien que en este nuevo mandato aquellos dirigentes a todos los niveles del Partido Revolucionario Dominicano PRM, que aún están sentados en el banco a la espera de una colocación, reitero sé que eso va a ocurrir en los próximos días.

Que por cierto más bien ya el presidente ha iniciado ese proceso con la colocación de un histórico miembro del PRM que se merece toda consideración por los aportes que en su vida privada ha hecho a la República Dominicano en su vida privada y especialmente en lo político al Estado Dominicano, me refiero al recién nombrado Ministro Administrativo de la Presidencia Andrés Bautista, líder agro empresarial y político de gran vocación y servicio, de seguro que con su experiencia aportará mucho al gobierno y al país.

Así que aplaudo e instó al Presidente Abinader a continuar por el camino que ha trillado desde su primer período de gobierno manteniendo esa posición de cero tolerancia a todo acto indecoroso y como muy bien él dice el que la hizo que la pague; también presidente reiteró que usted conoce muy bien a los dirigentes históricos del PRM que anhelan aportar al gobierno y al país desde una posición en su gestión, claro, el Estado no tiene la capacidad de satisfacer a todos en ese sentido, pero siempre existe una manera de buscarle la vuelta a las cosas e insistiendo en esto les recalco a los opositores que también usted conoce muy bien, decirles que trabajen y que por lo menos guarden las apariencias y se mantengan con un perfil más bajo, que no abusen de la tolerancia de un demócrata como el presidente Luís Abinader.

También estoy seguro que el presidente necesariamente removerá o sacará de su entorno a ciertos y determinados funcionarios que han actuado con petulancia y arrogancia y se les han ido los humos a la cabeza, atropellando y dañando a colaboradores entre otras acciones que desdicen y dictan mucho del comportamiento del propio presidente y de la política de acercamiento que ha impuesto Abinader desde que llegó al gobierno.